Fotovoltaicos afianzan dinamismo en México

La generación de electricidad mediante páneles solares en el país en los últimos seis años pasó a tener una participación de 0.7% a 5.3% en el total nacional y tanto los planes gubernamentales en Puerto Peñasco, Sonora, y otros cuatro proyectos anunciados por la Comisión Federal de Electricidad (CFE), así como 15 plantas privadas seleccionadas en la Convocatoria de la Secretaría de Energía, apuntan hacia el liderazgo de la generación fotovoltaica sobre las demás renovables en el corto plazo.

Según el Plan de Desarrollo del Sector Eléctrico, entre el 2018 y el 2024 la generación neta mediante tecnología fotovoltaica en el país aumentó 8.5 veces, de 2,176 a 18,640 gigawatts por hora, incremento que contrasta ampliamente con el alza de 21% en la generación limpia, de 13% en la generación total del país, y hasta de 60% de la generación eólica en el mismo periodo.

Y de cumplirse los planes, la generación fotovoltaica continuará en ascenso. Carla Ortiz Fuentes, presidenta de la Asociación Mexicana de Energía Solar Fotovoltaica (Asolmex) aseguró a El Economista que el principal desafío para alcanzar los ambiciosos objetivos de incremento en la generación renovable del país, la descarbonización del sistema y la transición energética, será que los nuevos modelos de inversión logren impulsar una expansión acelerada de la capacidad instalada de generación.

La empresaria señaló que la Secretaría de Energía ha planteado una meta de adiciones de capacidad ligeramente superior a los 28 gigawatts. “Sin duda, se trata de una cifra ambiciosa que refleja el objetivo de incrementar significativamente la oferta de energía limpia para respaldar el crecimiento de la economía nacional. Alrededor del 44% de esa nueva capacidad correspondería a tecnología solar fotovoltaica en gran escala, poco más de 12 gigawatts de adiciones, una cifra sin precedentes en nuestro país”, dijo.

Cabe recordar que en la segunda semana de diciembre, la CFE reveló que cuenta con proyectos en evaluación, licitación e inicio de construcción para añadir una capacidad de 1,516 megawatts fotovoltaicos, lo que significaría un incremento de casi 20% en esta tecnología a nivel nacional y un aumento de 3.5 veces la capacidad de producción eléctrica mediante páneles solares de la empresa del Estado.

Lo anterior ya que el pasado 23 de diciembre se pactó la firma del contrato para iniciar la construcción de la tercera fase, de 300 megawatts, de la central fotovoltaica Puerto Peñasco, en Sonora, con el compromiso de terminarla el 23 de diciembre de 2027. La operación de la fase cuatro, de 280 megawatts, está programada para iniciar en febrero de 2028, añadiendo así un total de 580 megawatts a los 420 megas ya instalados en lo que sería hasta ahora el proyecto fotovoltaico más grande de Latinoamérica.

Pero además, habrá dos nuevas plantas en Coahuila: Carbón II, de 376 megawatts, y Río Escondido, de 180 megawatts, para las que se ha establecido una mesa de trabajo de la Secretaría de Energía, la CFE y el Fondo Nacional de Infraestructura (Fonadin) en la que se coordina la publicación del concurso de estos proyectos, para finalizar la construcción de estos dos proyectos en septiembre de 2028.

Y se evalúa la instalación de dos plantas solares del sector público más: Las Garzas, en Durango, con una capacidad de 270 megawatts, y Los Girasoles, en Quintana Roo, que tendría 110 megawatts.

Privados en la planeación vinculante

En lo que respecta a la producción fotovoltaica privada, en la convocatoria de atención prioritaria a proyectos a la que convocó la Secretaría de Energía para acelerar el desarrollo de plantas que correspondan a la planeación vinculante del sistema para los próximos años, se anunció que los proyectos seleccionados entrarán en operación entre 2027 y 2028 y son 15 proyectos fotovoltaicos con una capacidad adicional de 2,471 megawatts.

Para el primer trimestre del próximo año aún queda pendiente la adjudicación de 1,319 megawatts solares, que son poco más de la tercera parte de lo que el gobierno estimó para dar prioridad en permisos y trámites por contar con factibilidad de conectarse a la red y participar en el crecimiento nacional de la generación renovable.

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