La demanda privada de dólares se desplomó el mes siguiente a las elecciones que vieron triunfador al oficialismo, tal como habían adelantado fuentes oficiales días atrás, pero el balance cambiario volvió a cerrar en rojo, como lo hizo en 9 de los últimos 12 meses, afectado básicamente por el fuerte déficit que arroja la cuenta de servicios.
La radiografía de lo sucedido con el mundo dólar en noviembre surge de la publicación del Balance Cambiario que hizo hoy el Banco Central (BCRA).
De allí surge que la compra neta de billetes y transferencia de divisas sin fines específicos del sector privado, que venía de marcar “picos” de US$ 6577 millones en septiembre y US$5434 millones en octubre, cayó en noviembre a US$1119 millones (es decir, en un 79,43%), una cifra muy similar a la que había estimado hace dos semanas el vicepresidente del BCRA, Vladimir Werning, al presentarse en un seminario en el exterior, buscando transmitir calma al respecto.
Dicho resultado se explica principalmente “por las compras netas de billetes sin fines específicos por US$871 millones y transferencias de divisas sin fines específicos por US$248 millones”, detalla el informe oficial que revela además que 1,1 millones “Personas humanas” realizaron ese mes compras brutas por US$1597 millones (en octubre habían demandado US$4669 millones), mientras otras 692.000 efectuaron ventas por US$509 millones.
Werning, en la presentación antes mencionada, había explicado que la caída “reflejó un cambio abrupto en las preferencias de los ahorristas y la percepción de riesgo en el país”, marcando un contraste con la desconfianza previa. “La historia de ajustes cambiarios en años electorales pesó sobre la confianza: el miedo al pasado, y no un desequilibrio económico, impulsó la demanda de dólares”, sostuvo entonces, antes de estimar que la dolarización preelectoral ascendió a US$35.000 millones, suma equivalente a más de 50% del total de medios de pago (M2 privado).
Desde que se levantó el cepo cambiario para las personas hubo una una tendencia creciente de la adquisición de dólares por parte de los argentinos. Ya en abril, las restricciones se había levantado a medio mes, las “personas humanas” compraron US$2077 millones. Esos montos se fueron luego incrementando levemente me a mes hasya junio.
Ya de julio en adelante empezó a pesar el “ruido” electotal y la demanda se disparó: en total llegó a los US$5432 millones hasta tocar el “pico” ya mencionado de US$6577 millones en septiembre (con un máximo de US$5130 millones demandado vía billete). Los datos muestran que, la baja signfificativa de noviembre, marca además el menor nivel de demanda de dólares desde la salida del cepo.
El informe da cuenta además de un nuevo cierre negativo en la cuenta corriente cambiaria, lo que indica que la economía local gasta más dólares de los que genera.
Ese rojo fue en noviembre de US$1163 millones y es “explicado principalmente por los egresos netos de las cuentas ‘Ingreso primario’ y ‘Servicios’ por US$1131 millones y US$559 millones, respectivamente, parcialmente compensados por los ingresos netos de ‘Bienes’ por US$535 millones”. Considerando los últimos doce meses, el déficit de esa cuenta llega a los US$2683 millones.
En el caso de la cuenta de servicios, buena parte del rojo surge del déficit del turismo. De hecho el informe estima que los egresos brutos por consumos de bienes y servicios pagados con tarjetas, viajes y pasajes (excluyendo servicios digitales y los bienes despachados/enviados mediante servicios postales) fueron de US$647 millones en noviembre, “explicados por los egresos brutos asociados a gastos con tarjetas por viajes estimados en US$472 millones, por US$101 millones asociados a servicios de transporte de pasajeros y US$74 millones a giros al exterior de operadores turísticos”.
Las cifras, aunque negativas, indican una mejora con respecto al déficit total en este rubro por US$1008 millones registrado en octubre, atribuible en casi 63% a los gastos turísticos realizados fuera del país.
El BCRA estima al respecto que un 70% de todos estos egresos “son directamente cancelados por los clientes con fondos en moneda extranjera”.
El informe también detalla que las reservas internacionales del BCRA aumentaron en US$954 millones en noviembre “por el aumento de la cuenta corriente en moneda extranjera de las entidades financieras en el BCRA, en un contexto de crecimiento de los depósitos en dólares”, aunque el saldo final resultó afectado “por el pago de intereses con el FMI por US$793,6 millones”.


